JUEGA Magali Lara con memoria y olvido.

2006

Por Oscar Cid de León
2006

Preservar la obra artística como objeto es lo menos importante para Magali Lara (Ciudad de México, 1965), creadora plástica que el martes inauguró una muestra cuyas piezas, una vez desmontadas, dejarán de existir materialmente para conservarse sólo en el recuerdo.
Se trata de Alzheimer, discurso visual que interviene con trazos de carbón las cinco mamparas de la sala vestibular del Museo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), también conocido como el Antiguo Palacio del Arzobispado (Moneda 4, Centro Histórico).
Esas mamparas deberán reutilizarse para montar, en determinado momento, otra exhibición, explicó en entrevista la artista, por lo que su obra se perderá en la memoria.
Sucede lo mismo con el Alzheimer, que todo lo borra y lo que perdura, en el mejor de los casos, es un vago recuerdo, apunta Lara.
\"El arte efímero tiene que ver con el momento, con la posibilidad del olvido y con esa cosa maravillosa de
hacer algo que no tiene ningún fin en particular, excepto jugar con la memoria\", señaló la pintora que en 2005 expuso Mi versión de los hechos en el Museo de Ciencias y Artes (MUCA) de la UNAM.
Los dibujos de la creadora remiten a la identidad personal, a la memoria como generadora de la historia, refirió por su parte José Ramón San Cristóbal Larrea, director general de Promoción Cultural, Obra Pública y Acervo Patrimonial de la SHCP.
\"Sin embargo\", dijo, \"también nos habla de la necesidad de trascender más allá, sin la necesidad del objeto como mensaje\".
Intervenidas in situ, las cinco mamparas (cuyos tamaños oscilan entre los 6 y 8 metros de largo por 4 de altura) muestran espirales y formas que recuerdan microorganismos y cuerpos casi vegetales.
\"Es abstracción y no. Ahora sabemos que no hay nada tan abstracto ni nada tan figurativo, lo que hay son intermedios\", señaló la artista egresada de Artes Visuales en la Escuela Nacional de Artes Plásticas de la UNAM y exbecaria del Sistema Nacional de Creadores del Conaculta.
El discurso de las obras fue determinado por el espacio y la intuición, con un amplio margen a la espontaneidad.
\"Creo que cada forma tiene un sentido, pero específicamente el espiral es para mi la cuestión de la memoria\", puntualiza.
Alzheimer, comparte Lara, nace como reflexión plástica luego de que la enfermedad asomó en su círculo familiar.
Para las personas ajenas al padecimiento, los recuerdos son totalmente definitorios; pero hay lugares que existen sin los recuerdos y que son difíciles de alcanzar, recordó la artista que ha realizado exposiciones individuales en Alemania, Suiza, Francia, Cuba, Estados Unidos y España, entre otros países.
La muestra permanecerá abierta al público hasta el 25 de febrero del 2007, para después deslizarse a los terrenos del recuerdo.

Tel. (52 777) 317 3956. Cuernavaca, Mor. México.
oficinamagalilar@gmail.com.